Para que la calle sea accesible, las aceras deben ser superiores a los dos metros, haciendo por tanto inviable una segunda línea de estacionamiento.
La concejala de Urbanismo, Ana Isabel Estarlich, ha dado a conocer el informe de Fernández-Pacheco Ingenieros con el que se responderá a los vecinos que firmaron a causa del arreglo de la calle y que, principalmente, solicitaban que no se retirasen aparcamientos de la zona.
El informe toma como referencia el documento técnico de condiciones básicas de accesibilidad y no discriminación para el acceso y utilización de los espacios públicos urbanizados de la Orden VIV/561/2010 en el que se refleja que la calle, “en todo su desarrollo poseerá una anchura libre de paso no inferior a 1,80 metros que garantice el giro, cruce y cambio de dirección de las personas independientemente de sus características o modo de desplazamiento”.
En el documento, precisamente se detalla, atendiendo a las características de la calle, que no es viable con dos líneas de aparcamiento porque la anchura para paso de vehículos oscilaría entre 2,55 y 2,80 metros, “insuficiente para maniobras de giro o aparcamiento y el paso de vehículos pesados”.
Añade además que las acercas de 1,80 metros “no serían suficientes para cumplir con la normativa”, ya que existen obstáculos como escalones en la entrada de algunas viviendas que imposibilitan respetar la anchura mínima que marca la norma para garantizar su accesibilidad. Es por ello que la solución adoptada descarta “la situación actual con bandas de aparcamiento en línea a ambos márgenes de la calle” para cumplir con la normativa de accesibilidad.
Por ello la propuesta que se está aplicando para realizar las obras de “una de las calles más necesitadas de la localidad”, según Ana Estarlich, es la acera sur de 2,20 metros, “la más próxima al Paseo Juan Ramón Ramírez”, la norte que varía entre 2,15 y 2,40 metros, una calzada de 3,80 metros y una única banda de aparcamiento de 2 metros.
Estarlich ha recordado que se producirán cortes puntuales al tráfico en la zona, que el tiempo de ejecución previsto es de cuatro meses y que estas obras supondrán una inversión de 350.000 euros para la remodelación integral de la misma, 60.000 euros de los cuales los aporta la Diputación mediante el POS y la cuantía restante la aporta el Ayuntamiento.
